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      ¿Buscas un momento de relajación? Sigue nuestros consejos para convertir tu cuarto de baño en un remanso de paz.

      Un cuarto de baño zen

      El cuarto de baño es el espacio de la casa por excelencia para relajarse y disfrutar de agradables momentos de bienestar. Entonces, ¿qué mejor que una decoración zen en tu baño para recargar las pilas? Un cuarto de baño zen es una garantía de unos incomparables momentos de relajación y bienestar dignos de un spa. ¡Descubre lo esencial para convertir tu cuarto de baño en un espacio excepcional!
       

      Elige colores neutros

      El secreto de un cuarto de baño zen reside, en gran parte, en la elección de colores. La regla es simple: da prioridad a los tonos neutros y los tonos claros. Este regla se aplica tanto a las paredes como al mobiliario del cuarto de baño. Conviene evitar los colores vivos porque pueden resultar demasiado agresivos y poco propicios a la relajación. Sin embargo, el blanco, el crudo, el beige, le marrón o el taupe son algunos de los muchos colores que invitan la calma y al relax. Si quieres aportar un toque de color a tu cuarto de baño, es preferible elegir colores cálidos y suaves como el verde claro. ¡Una decoración zen no quiere decir una decoración sosa y aburrida! Puedes combinar, por ejemplo, un mueble de baño con lavabo blanco y con un armario verde para darle un poco de vida a la pieza o con un armario de baño blanco que ayude a reflejar la luz. 
       

      Elegir materiales naturales

      La decoración zen es una decoración natural. Los materiales naturales tienen tonos neutros y suaves que son ideales para crear una atmósfera cálida y acogedora que invite a la calma y a la relajación. Así que... ¡Di adiós a los materiales demasiado fríos como el hierro o el metal y dale la bienvenida a materiales más naturales y relajantes! Un armario de bambú, un lavabo de piedra o una pared de guijarros para tu ducha.... ¡Son muchas las posibilidades de jugar con materiales naturales para conseguir una atmósfera que inspire bienestar! También puedes, por ejemplo, jugar con muebles de cuarto de baño de madera o con un revestimiento de madera para tu bañera. Elige maderas exóticas como la teca o el bambú. Son más resistentes a la humedad y a los cambios de temperatura.
       

      Apostar por un estilo minimalista

      Un cuarto de baño zen es un espacio limpio y despejado donde se respira calma y tranquilidad. Para liberar el espacio visualmente, es preferible elegir muebles suspendidos para aportar un aire más ligero a la pieza. En cuanto al diseño, conviene decantarse por muebles de líneas sencillas y depuradas. Un cuarto de baño zen es también un cuarto de baño bien organizado. Por ello, es necesario ordenar y guardar todos tus productos de higiene y maquillaje para favorecer los momentos de tranquilidad. 
       

      Optar por accesorios 'zen'

      Los 'accesorios zen' te permitirán darle el toque final a tu cuarto de baño para conseguir un espacio 100% relajante. Una cesta de mimbre, por ejemplo, aportará calidez al espacio y será ideal para guardar tus toallas. Las plantas también son una buena forma de dar vida a tu baño. Las plantas tropicales soportan el calor y la humedad y aportarán un ambiente natural y relajante. Basta con una o dos plantas, no conviene saturar demasiado el espacio puesto que resultaría perjudicial en nuestra búsqueda de serenidad y relajación.
       

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