¿Qué mobiliario elegir para una entrada?

¿No decimos siempre que la primera impresión suele ser determinante? El mobiliario y la decoración de la entrada son, por lo tanto, igual de importantes que los del salón y las distintas habitaciones. Este lugar de paso requiere un mobiliario específico para ser plenamente funcional. ¡Te lo explicamos todo!

¡No hay nada como un práctico mueble zapatero para optimizar el espacio de la entrada ! No en vano, es el lugar ideal para quitarse los zapatos al entrar en casa y guardarlos directamente para luego encontrarlos sin esfuerzo cuando vayas a salir. Los diseñadores de muebles han venido creando todo tipo de modelos que se adapten a estos particulares espacios. Simples estantes para poner en el suelo, muebles más elaborados con una profundidad reducida para adaptarse al espacio de la entrada e incluso modelos con un asiento integrado, tipo banco...

¡Una buena idea para quitarse los zapatos con comodidad! También, si el espacio lo permite, puedes pensar en instalar un sillón pequeño o en un taburete.

A la hora de elegir un mueble que aporte elegancia a la entrada, la consola se lleva todos los votos. Al ser de un tamaño más bien reducido y poco profundo, este mueble es ideal para este tipo de espacios puesto que no obstruye el paso. Este mueble, práctico y decorativo, es ideal para colocar algunos de tus objetos preferidos, como un jarrón o una escultura. También resulta extremadamente práctico para poner un vacía-bolsillos en el que dejar las llaves al llegar a casa, un bloc de notas o una caja de pañuelos. Y, si todavía lo utilizas, es el lugar prefecto para un teléfono fijo. Así podrás hablar con un poco más de intimidad y lejos del ruido de la cocina, el televisor...

Dependiendo del espacio del que dispongas, puedes usar la entrada para instalar muebles que te sirvan para almacenar ropa, libros, accesorios... Si tienes espacio suficiente... ¿Por qué no apostar directamente por un vestidor para guardar tus bolsos y abrigos? 
También puedes optar por un armario sencillo o cambiar la consola por una cómoda. Una biblioteca puede ser otra excelente y práctica opción decorativa. Sin embargo, si la entrada tiene unas dimensiones más bien reducidas, es preferible decantarse por poner estanterías en la pared donde almacenar algunos libros y accesorios que, de paso, ayuden a dar vida a la entrada. También puedes usar el espacio que hay encima de la puerta de entrada para instalar un estante en el que puedas poner cajas de almacenamiento. Es perfecto para guardar todas esas cosas que usas solo una vez al año.

Si la configuración de la entrada lo permite, puedes crear un espacio de trabajo con escritorio para tener un poco más de privacidad a la hora de trabajar de la que tendrías en el salón. Conviene elegir un modelo práctico y poco voluminoso con cajones de almacenamiento o un modelo extensible o retráctil que te permita liberar espacio cuando no estés trabajando. También es recomendable elegir una silla o sillón que pueda deslizarse fácilmente debajo del escritorio para no entorpecer el paso. ¡Importante invertir en una buena lámpara de mesa para que el espacio esté bien iluminado!